Contacto con una pequeña organización local llamada WORK AND HAPPINESS, cuyo nombre me dio buenas sensaciones y sobre todo porque resulto ser el programa más barato que pude encontrar. Me sorprendió recibir al día siguiente un correo agradeciendo mi interés seguido de una llamada en el transcurso de esos días de Frank, su director, saludándome de manera muy agradable y ofreciéndome toda su ayuda para completar con éxito mi propósito. Tal fue así, que incluso envío personalmente una carta al consulado de Ghana en Madrid para facilitar la obtención de mi visado.
Es entonces cuando da comienzo a un proyecto personal de acercamiento y sensibilización con la cultura africana. Se trataba de conocer sobre el terreno la situación de los países del Sur y de sus gentes para poder tomar una decisión sobre mi futuro. Necesitaba conocer de primera mano cual puede ser mi papel dentro del apasionante mundo de la cooperación y determinar de que manera nuestra ayuda puede ser más efectiva. El objetivo era analizar las carencias existentes dentro de las comunidades para establecer compromisos de colaboración futuros.
Durante los siguientes días seguí el programa de vacunación recomendado por el servicio de Sanidad Exterior de mi comunidad, creo que si me hubiesen hecho un control de orina, yo también hubiese dado positivo…
También visite decathlon, cuyo material tan buen resultado me dio en el Camino de Santiago, para adquirir los últimos artículos necesarios para mi viaje, entre otros unas botas de futbol por 14 euros que he de reconocer me salieron buenísimas…
Contacto en último lugar con mi amigo y agente personal de CONSULTING DE SEGUROS, MOYA, para contratar el seguro de viaje necesario y tras reunir poco más de una docena de libros, unos cuantos juguetes (que tome prestados de mi sobrino), unos equipajes de futbol (que me cedió otro amigo, JOSE, gracias al AYUNTAMIENTO DE ENTRAMBASAGUAS) y mucha ilusión, emprendí una toma de contacto con ese continente olvidado que es: AFRICA.
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